La Cantera

Dejamos atrás el 2022, año poco productivo, ciclistamente hablando, y que empecé con mal pie o podría decir que de "mala mano", con aquella caída tonta, que me tuvo con las ruedas paradas casi dos meses por un esguince en el dedo y que marcaría el devenir de la temporada en la que, no llegúe a realizar ni la mitad de kilómetros que la anterior.

Comenzamos nuevo año y aunque la previsión ciclista, por motivos familiares, tampoco sea la más halagüeña, intentaremos que las rutas sean iguales o mejores que de aquí para atrás y que mejor que empezar con una semi exploración que llevaba tiempo pisteando por las diferentes páginas de las que disponemos en la red.

Sábado, algo de fresco a primera hora pero con buena previsión a lo largo de la mañana para ir entrando en calor. Estamos casi, excepto Carlos que anda acatarrado y se reserva para la siguiente. Comenzamos a pedalear dirección Establiments poniéndonos al día de nuestras navidades hasta llegar a la entrada de la Cantera de Establiments, protagonista principal de la ruta de hoy. A la entrada, coincidimos con otros dos bikers que nos preguntan hacia donde vamos y al decirles que vamos a Sa Creu un "bufido" seguido de medio risilla nos avisa de que la subida va a ser larga. Pero bueno, para hacer algo fácil hubiéramos ido por el paseo marítimo.

 

Entramos a la cantera y la primera panorámica es llamativa: agujero que han abierto allí, durante no se cuantos años y que ha eliminado del mapa lo que sería una bonita sierra, dejando un socavón de arena, piedra y alguna que otra construcción para explotar lo que de allí extrajeran. Comenzamos a rodar y el lugar da la impresión de apocalíptico o como dijo David: "esto parece sacado de The Walking Dead", y es que está todo abandonado a excepción de algunos bloques puestos a modo parapeto que parece que la gente usa para jugar a algún tipo de juego de guerra, estilo paintball, airsoft o similar. 


Seguimos el que creemos que es el camino planificado, cogiendo rápidamente altura por uno de los laterales de la mina desde donde, al coronar, se observa aún mejor el tamaño de semejante agujero. Una vez arriba, descubrimos que hay dos agujeros separados y que nos hemos pasado el desvío subiendo por donde no es. Seguimos y explorando un poco vemos que podemos enlazar con la ruta original sin tener que volver a bajar hacia el desvio, pero poco a poco nos vamos dando cuenta del error: hay que subir empujando la bici, por una pendiente brutal. Ahora en casa, veo que fueron unos trescientos metros, pero in situ parecieron tres kilómetros. Llegamos arriba y eso si, las vistas desde aquí, de la zona de la costa de Palma, son increíbles pudiendo observar unas cabras con la catedral de fondo. Parada para retomar fuerzas y continuamos, que nos queda más de la mitad de la ruta y son las once y pico de la mañana, más de dos horas y media para recorrer algo menos de doce kilómetros! La velocidad media de la ruta de hoy, no será la mejor, pero como venimos a pasar un rato agradable, ese es el último de nuestros problemas.

La Catedral al fondo
 

Retomamos la marcha y ahora la pendiente es en descenso, pero con algún tramo bastante inclinado que poco a poco va mejorando e invita a hace encima de la bici, acabando de nuevo casi en la entrada de la carretera, desde donde Miquel nos abandona para atender otros asuntos, continuando el resto de ruta Ismael, David y un servidor.

La paliza que llevamos para el cuerpo es considerable y lo que queda no invita al optimismo, que sumado al tiempo de inactividad, las comilonas y que el inicio de temporada, para mi no ha sido el mejor, físicamente hablando, hará que sufra de lo lindo para acabar llegando a Sa Creu por los rampones de hormigón de la Serra de Son Marill.



 

Algo más de la una y cuarto de la tarde, después de 20 kilómetros de sufrimiento y vistas maravillosas, la carretera de Sa Creu es lo que nos separa de una cervecita fresca para concluir la primera ruta del nuevo año, eso si con la vista puesta en la siguiente y prometiendo volver por la zona, cuando el físico lo permita, para seguir explorando la infinidad de caminos y senderos que uno va "descubriendo" a medida que pasan los kilómetros.

 

Os dejo el track, recordando que la salida de la cantera no es ciclable, aunque hay alternativa, que veremos otro día:

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Hasta la semana que viene!


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